Desarrollo sostenible: el poder de los ciudadanos globales
¿Has escuchado hablar del desarrollo sostenible? Seguro que sí, todo el mundo habla de ello! Pero, ¿qué es realmente y por qué es tan importante? Yo mismo he visto una charla TED en la que se profundiza en este tema y ahora quiero contártelo en pocas palabras. Además, quiero invitarte a leer mi artículo donde explico en detalle lo aprendido. Te aseguro que te sorprenderás de cómo la particip
La importancia de la participación ciudadana en el desarrollo sostenible
Hoy en día, escuchamos constantemente sobre la importancia de la participación ciudadana. Sin embargo, ¿alguna vez nos hemos detenido a analizar lo que esto realmente significa? ¿Qué significaría si realmente nos organizáramos y actuáramos de manera colectiva? A menudo nos emocionamos al iniciar proyectos o actividades, pero luego los abandonamos y nos desconectamos de la realidad a la que aspiramos como seres humanos.
Me gustaría hacerte una pregunta: ¿Cuántas cosas has comenzado y luego dejado inconclusas? Ya sea una clase de baile, ir al gimnasio o retomar clases de idiomas, es común que empecemos con entusiasmo pero luego perdamos el interés. Incluso esta charla en la que estamos ahora mismo es parte de esa participación activa para conectar e inspirar.
El desarrollo sostenible: un concepto latente
Cuando me invitaron a dar esta charla, sabía desde el principio cuál era el mensaje que deseaba compartir. Sin embargo, a lo largo de los días he recibido comentarios como “este tema está muy de moda”, pero si está tan de moda, ¿por qué no todos lo seguimos?
El concepto del desarrollo sostenible no es nuevo; data del año 1987 en el informe final de la Comisión Mundial del Medio Ambiente y Desarrollo. A pesar de su gravedad y complejidad, este tema sigue siendo latente hoy en día y no recibe toda la atención que merece.
El desarrollo sostenible se define como aquel que satisface las necesidades de la generación presente sin poner en peligro la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades. Es decir, debemos trabajar hoy para construir un futuro próspero y sostenible.
Como ciudadanos del mundo, queremos dejar un legado positivo. Sin embargo, tenemos datos alarmantes en nuestro país: los habitantes de México producen en promedio 1.3 kilogramos de basura por persona cada día, más que cualquier otro país en América Latina. Además, cerca del 73% de la población padece obesidad según la OCDE y se desperdician 38 mil kilos de comida cada minuto, lo cual podría alimentar a 25.5 millones de personas.
Todos estos problemas están relacionados con una actividad que llevamos a cabo diariamente: el consumo. El consumo forma parte de nuestra vida cotidiana; todos los días compramos algo. Es una mezcla de placer, ocio y diversión. Sin embargo, el problema surge cuando los recursos disponibles se vuelven escasos debido al aumento constante de la población.
Se espera que para el año 2030 seamos más de 8.600 millones de personas en el mundo. Somos compradores compulsivos que no nos interesa saber realmente dónde proviene nuestro producto o cuáles son sus implicaciones secundarias.
Haciendo preguntas difíciles
Necesitamos hacer las preguntas difíciles a las empresas y marcas con las que consumimos: ¿De dónde viene? ¿Cómo se produce? ¿Qué daños secundarios causa? ¿Es realmente sostenible? Estas preguntas también deben ser dirigidas a nosotros mismos: ¿De dónde proviene el agua que bebemos, considerando que es el nutriente más poderoso para nuestro cuerpo? Es increíble y a la vez preocupante que bebamos agua clorada todos los días sin cuestionarlo.
El 70% de nuestro cuerpo está compuesto por agua, es decir, consumimos diariamente sustancias antinaturales. ¡Imagínate esto! Un millón de botellas de plástico desechables se consumen cada minuto en el mundo. Al terminar esta charla, esa cifra habrá aumentado a más de 10 millones.
El mundo ha cambiado y aquellos que vemos más allá de nuestras fronteras estamos del lado correcto de la historia. Necesitamos acelerar el cambio positivo para garantizar una calidad de vida óptima en todos los niveles. Los sueños están en nuestras manos y debemos ser parte del cambio.
La agenda 2030: un plan para un futuro sostenible
Somos una sociedad interconectada e intergeneracional. Vivimos en una época en la cual todos podemos ser escuchados. Tenemos ejemplos como Greta Thunberg, una joven activista de 17 años que movilizó e inspiró a todo el mundo con su voz y su compromiso a largo plazo.
Si bien es cierto que todos queremos ayudar, muchas veces no sabemos cómo hacerlo. Sin embargo, existe una manera concreta: a través de la Agenda 2030. Esta agenda contiene 17 objetivos de desarrollo sostenible adoptados por la Asamblea General de las Naciones Unidas en septiembre de 2015. En ella, 193 países miembros se comprometieron a cumplir con estos objetivos, incluyendo México.
La Agenda 2030 es un plan de acción a largo plazo en favor de las personas y el planeta. Contiene 17 objetivos y 169 metas integradas e indivisibles que buscan promover el crecimiento económico, la inclusión social y la sustentabilidad ambiental. Además, busca fortalecer el estado de derecho, la transparencia y la rendición de cuentas.
Es importante destacar que todos debemos enfrentar estos retos a una escala global y de manera sistemática. Debemos movilizarnos y actuar hoy mismo. El movimiento está en todas partes al igual que la información; no hay excusas para no estar involucrados.
Somos ciudadanos globales
Todos podemos ser parte del cambio; solo tenemos que organizarnos e impulsarlo en nuestra vida diaria. Ser ciudadanos globales implica ser conscientes de lo que sucede a nuestro alrededor y tomar medidas para cambiarlo.
Un buen amigo o un buen ciudadano es aquel que apoya y es consciente del mundo en el que vivimos. Todos hacemos la diferencia; solo necesitamos decidirnos, despertar nuestra solidaridad y actuar según nuestras posibilidades.
La Agenda 2030 es una visión ambiciosa y transformadora donde todas las formas de vida pueden prosperar. Nunca antes los líderes del mundo se habían comprometido tanto con una agenda tan amplia y universal como esta.
Somos los dueños de nuestra historia y el poder nos pertenece como ciudadanos. Aquí es donde pertenecemos, este es nuestro hogar y está en juego. Por lo tanto, salvar el mundo comienza con cada uno de nosotros, con nuestro cuerpo, mente y alma.
Si bien es cierto que la Agenda 2030 se encuentra en todos los niveles de gobierno y sociedad, cada ciudadano puede hacer algo para lograr un desarrollo sostenible. Una acción realizada por todos traerá consigo cambios reales.
Hoy en día hemos comprendido la importancia de trabajar juntos y cómo nuestras acciones individuales pueden marcar la diferencia sin importar dónde nos encontremos o cuál sea nuestra dimensión geográfica o geopolítica. Todos somos importantes y debemos adoptar un nuevo estilo de vida sostenible.
Es hora de valorar las actividades que llevamos a cabo diariamente y reflexionar sobre qué podemos modificar, dejar de hacer o evitar. Aspiremos a tener ciudades sostenibles; esto puede ser una realidad si cada uno de nosotros decide cambiar su estilo de vida.
La tarea no es dejar a nadie atrás
La Agenda 2030 es una hoja de ruta trazada para lograr cada objetivo con metas e indicadores que nos permiten medir los avances. Estamos viviendo la década de la acción, por lo cual nuestra participación nunca ha sido tan importante.
Todos podemos actuar una vez o muchas veces; hemos visto avances considerables gracias a miles de personas que se han unido y movilizado en pos del cambio positivo. Tenemos ejemplos inspiradores como el chef José Andrés, quien trabaja a lo largo de América para distribuir comida fresca a quienes más lo necesitan. También está el joven estudiante Malone Mukwende, quien diseñó y escribió un manual sobre cómo detectar enfermedades en la piel de color.
Los superhéroes existen y son diferentes a como solemos imaginarlos. No llevan capa, pero tienen un poder especial: el poder de hacer la diferencia. Piensa en alguien que te inspire; el mundo está lleno de ellos, aunque muchas veces sean héroes anónimos.
Despertemos y tomemos la oportunidad que cada uno tiene a su alrededor para ser buenos amigos y buenos ciudadanos. Nuestra conducta individual determina el destino de todos. Es tiempo de impactar generaciones, no solo a través de nuestra huella ecológica sino también mediante nuestro compromiso con los demás.
El poder nos pertenece, pero también nos corresponde saciar nuestra sed de cambio. ¿Estás dispuesto a cambiar tu estilo de vida? La tarea es no dejar a nadie atrás.
Nuestro mundo se enfrenta hoy en día a grandes desafíos ambientales y sociales que requieren una participación activa por parte de todos nosotros. El desarrollo sostenible es clave para garantizar un futuro próspero para las generaciones venideras.
A través del consumo responsable, la adopción de estilos de vida sostenibles y la participación ciudadana en proyectos como la Agenda 2030, podemos lograr cambios reales y duraderos.
Cada uno tiene el poder y la responsabilidad de marcar la diferencia en el mundo. Despertemos nuestra solidaridad y trabajemos juntos para construir un futuro mejor.
Recuerda: la tarea es no dejar a nadie atrás. ¡Es hora de actuar!