Descubre palabras poderosas para cambiar tu perspectiva del mundo
¿Quieres cambiar tu perspectiva del mundo? Descubre las impactantes ideas de Ana Cristina Restrepo en una charla TED que te dejará sin aliento. Prepárate para desafiar tus pensamientos y abrir tu mente. ¡Comencemos este viaje juntos!
Hace unos días tuve la oportunidad de ver una charla TEDx muy interesante titulada “El poder de la voz femenina”. La ponente, Ana Cristina Restrepo, compartió su experiencia personal y reflexiones sobre cómo las mujeres enfrentamos obstáculos para expresarnos y ser escuchadas en la sociedad. Su historia me impactó y me hizo reflexionar sobre mi propio papel como mujer en el mundo.
Una voz silenciada
La charla comenzó con una anécdota muy reveladora. Ana Cristina recordó cómo, hace muchos años, vio un letrero publicitario que decía: “Deja que esta cerveza hable por ti”. En ese momento, miró a su bebé en el asiento trasero del carro y se preguntó cómo era posible que existieran empresas que quisieran callar a las mujeres. Eso la llevó a escribir una columna breve para un periódico local, donde expresaba su deseo de vivir en una sociedad donde las mujeres no fueran silenciadas.
Su columna fue publicada y llamó la atención del periódico más importante de la región. A partir de ahí, empezó a escribir semanalmente para ellos. Sin embargo, se dio cuenta de que tener un espacio para expresarse no significaba tener plena libertad. Habló con un veterano columnista quien le aconsejó abrirse camino poco a poco y dejar que los lectores reconocieran su voz auténtica.
La importancia de encontrar nuestra propia voz
A lo largo de su carrera periodística, Ana Cristina enfrentó comentarios negativos sobre su voz frágil e incluso recibió instrucciones para hablar más fuerte en la radio. Sin embargo, aprendió que lo realmente importante no es el tono o el volumen de nuestra voz, sino la autenticidad y el significado de nuestras palabras.
Según cifras y conceptos colombianos, solo el 21% de los columnistas en Colombia son mujeres. Esto refleja una brecha significativa en la representación femenina en los medios de comunicación y en espacios públicos de opinión. Ana Cristina destacó la importancia de contar con más académicas y políticas escribiendo columnas, ya que son ellas quienes toman decisiones importantes y analizan a fondo los problemas sociales.
El poder transformador de las palabras
Ana Cristina mencionó un libro que leyó en su adolescencia llamado “Una habitación propia” de Virginia Woolf. A través de este texto, descubrió a una escritora llamada Aphra Behn del siglo XVII, quien fue capaz de vivir y expresarse a través de sus palabras. Le pareció extraño que todavía hoy se cuestione a las mujeres sobre su capacidad para vivir y escribir.
Ella encontró en la escritura una forma poderosa de vencer sus miedos y expandir su mundo. Destacó cómo las palabras tienen el poder tanto para construir como para destruir mundos enteros. Cuando se limita el lenguaje femenino, se restringe también nuestra capacidad para crear e influir positivamente.
Hablar a pesar del miedo
Ana Cristina compartió algunas estadísticas preocupantes sobre la violencia física, verbal y económica que enfrentan las periodistas en su profesión. Muchas de ellas no denuncian por miedo a la ineficiencia de las autoridades y a los prejuicios que se tienen sobre las mujeres al denunciar.
A pesar de estos obstáculos, Ana Cristina ha utilizado su voz para expandir los límites de su mundo y el de otras mujeres. Ser columnista o tener un micrófono en una emisora no solo es para expresar ideas, sino también para conjurar miedos y representar a otras mujeres que también quieren hablar.
La charla de Ana Cristina Restrepo me dejó con una sensación de empoderamiento y motivación. Aprendí que encontrar mi propia voz es un proceso gradual, pero es fundamental para ser escuchada y generar cambios positivos en la sociedad. No importa si hablo fuerte o bajo, lo importante es decir lo que realmente quiero decir con honra y apego a las palabras.
Me di cuenta de la importancia de contar con más voces femeninas en los medios de comunicación y espacios públicos, ya que nuestras experiencias únicas pueden contribuir a construir un mundo más equitativo e inclusivo.
A partir de ahora, me comprometo a hablar y escribir sin temor, sabiendo que mis palabras tienen el poder transformador necesario para cambiar realidades. Igualmente, animo a todas las mujeres a hacer lo mismo: ¡hablemos y escribamos sin miedo!