El fascinante mundo de los insectos: descubre su papel en la naturaleza
¿Sabías que los insectos son mucho más que pequeñas criaturas molestas? Nicolás, un entomólogo apasionado, nos revela su asombrosa importancia en nuestro ecosistema. Prepárate para descubrir el fascinante mundo de los insectos y su papel fundamental en la naturaleza. ¡No te lo puedes perder!
Hola, buenas noches. ¿Cómo están? ¡Qué emoción poder decir eso! Mi nombre es Nicolás Martínez y soy biólogo entomólogo. Sí, estudio insectos, esos bichos que para mí son súper interesantes y hermosísimos. Pero sospecho que no todos piensan lo mismo. Así que les quiero preguntar: cuando hablo de insectos, ¿con cuál de estas reacciones se identifican?
Me muestra tres opciones en pantalla y les pido que elijan una.
Insectos: más allá de su apariencia
La verdad es que si les pregunto esto, seguramente me dirán que los bichos son asquerosos, feos y hay que matarlos sin remordimientos. Pero la realidad es otra: los insectos son los organismos más comunes del planeta. Hay cerca de un millón de especies descritas y llevan aquí desde hace 300 millones de años, mucho antes que nosotros.
Los insectos viven en el suelo, debajo del suelo, sobre otros animales… Tienen una gran variedad de formas de vida y adaptaciones sorprendentes. Algunas especies se alimentan de cadáveres, excremento o madera; otras se nutren de sangre o néctar vegetal. Estas adaptaciones hacen de los insectos colonizadores exitosos en casi cualquier tipo de ambiente.
El papel indispensable
Pero ¿qué pasaría si desaparecieran los insectos? El apocalipsis estaría a la vuelta de la esquina. Los insectos son indispensables para el funcionamiento de todos los ecosistemas. Sin ellos, se desencadenarían una serie de reacciones que culminarían en el colapso del mundo tal como lo conocemos hoy en día.
Los insectos cumplen diversas funciones vitales. Por ejemplo, actúan como “recicladores”, descomponiendo la materia orgánica de plantas y animales y liberando nutrientes esenciales para nuestra vida, como el nitrógeno presente en el ADN y los aminoácidos que forman las proteínas.
Un ejemplo claro de esto son los escarabajos estercoleros. Estos bichitos se alimentan de excremento y forman unas pelotas grandes que transportan con sus patas traseras hacia su nido. Allí entierran estas pelotas, facilitando así la descomposición de la materia fecal en nutrientes que pueden ser aprovechados por las plantas y otros animales a lo largo de las cadenas tróficas.
Pongamos un ejemplo más cercano: las vacas se alimentan de pasto. Imaginen qué ocurriría si no existieran estos escarabajos estercoleros: la materia fecal se acumularía tanto que las vacas no podrían alimentarse adecuadamente del pasto. Como ven, estos insectos aportan mucho para evitar la acumulación excesiva del excremento y mantener un equilibrio natural.
Insectos: controladores biológicos
Pero eso no es todo. Los insectos también cumplen un papel fundamental como agentes de control biológico. ¿Qué quiere decir esto? Que nos ayudan a controlar las poblaciones de organismos que pueden ser perjudiciales para nosotros. Algunos insectos se alimentan de estos organismos o los parasitan, evitando así su proliferación.
Un ejemplo claro es el caso de una avispa que inocula sus huevos en otra especie que se alimenta de pinos. De esta manera, la avispa mata a este organismo perjudicial para nosotros, ya que los pinos tienen un valor económico importante debido a la madera. Así que los insectos son buenísimos como controladores de plagas.
Polinizadores esenciales
Además, los insectos son polinizadores clave para la mayoría de las plantas con flores. Sí, esos bichitos también tienen un rol importante en nuestra cadena alimentaria. Sin ellos, no tendríamos frutos secos, legumbres, frutas ni verduras de hoja.
Cuando pensamos en polinizadores, generalmente nos viene a la mente las abejas. Pero hay muchos otros insectos polinizadores igualmente importantes: escarabajos, polillas, mariposas y moscas también contribuyen a este proceso vital.
Ahora bien, sé que vivimos en un mundo capitalista donde lo económico tiene gran peso. Por eso quiero mencionarles algo sorprendente: hace algunos años unos investigadores estimaron el beneficio económico directo de los insectos en Estados Unidos y llegaron a la asombrosa cifra de 60 mil millones de dólares anuales ¡solo en ese país! Imagínense cuánto impacto positivo tienen estos bichitos.
Insectos: indicadores ambientales
Por si fuera poco, los insectos también nos brindan información valiosa sobre la calidad de los ambientes en los que viven. Por ejemplo, hay unos escarabajos acuáticos llamados Elmidae que pueden decirnos mucho sobre la calidad del agua.
Estos bichitos son realmente hermosos y casualmente son con los que yo trabajo. Las larvas viven en el agua y, cuando crecen, salen del agua haciendo un capullo similar al de las mariposas. Del capullo emerge el adulto, quien luego se sumerge nuevamente y no sale nunca más.
Estos escarabajos dependen mucho del oxígeno presente en el agua. Si encontramos muchos de ellos, podemos decir que la calidad del arroyo o río es buena. Además, tienen una característica sorprendente: en su vientre tienen pelitos dorados llamados “torméntum” que no se mojan. Estos pelitos retienen una burbuja de aire, permitiendo al insecto respirar bajo el agua sin necesidad de salir a tomar aire.
Lo interesante es que estos pelitos son muy sensibles a contaminantes como detergentes o sólidos en suspensión. Por lo tanto, si encontramos pocos de estos bichitos acuáticos, podemos sospechar que la calidad del agua no es buena.
Insectos: una preocupante disminución
Ahora bien, ¿qué está pasando con las poblaciones de insectos? ¿Por qué cada vez vemos menos? Investigadores han recopilado información durante los últimos 20 años y han notado una baja significativa en el número de insectos.
Esto se debe a que las áreas destinadas a la urbanización y agricultura han aumentado considerablemente, lo cual ha llevado a una mayor contaminación y degradación del hábitat, especialmente para los insectos. Como resultado, sus números han disminuido notablemente.
Consecuencias devastadoras
Pero ¿cuáles serían las consecuencias de esta disminución? La producción de productos agrícolas caería aproximadamente un tercio, lo cual es una cifra alarmante. Además, muchas aves, mamíferos e incluso reptiles que se alimentan principalmente de insectos podrían extinguirse.
El impacto económico sería devastador. Se alterarían numerosos procesos químicos y biológicos en los ecosistemas. En resumen, el mundo tal como lo conocemos dejaría de existir.
Hoy les he compartido mi pasión por los insectos y la importancia vital que tienen en nuestro planeta. Espero haber sembrado una semillita en ustedes para que valoren estos pequeños seres vivientes. Los insectos son mucho más que bichitos asquerosos o molestias veraniegas: son indispensables para el equilibrio natural y nuestra propia supervivencia.
Pongamos en valor su papel como recicladores, controladores biológicos y polinizadores esenciales. Tomemos conciencia sobre la necesidad de protegerlos y preservar sus hábitats naturales.
Juntos podemos marcar la diferencia y asegurar un futuro sostenible tanto para nosotros como para los insectos. ¡Gracias por escucharme!