Historias Gráficas: Recetas para Sobrevivir
¿Conoces a Sebastián Cadena? Déjame contarte sobre su increíble charla TEDx donde descubrirás cómo los cómics pueden cambiar el mundo. ¡Te prometo que te emocionará!
Desde muy pequeño, siempre he sido una persona bastante distraída. No podía estar más de dos minutos pensando en algo concreto, siempre tenía un millón de ideas en mi cabeza y no sabía qué hacer con ellas. Me sentía un poco aislado de todo lo que pasaba a mi alrededor. Obviamente, esto me causó muchos problemas cuando entré a la escuela y al colegio, lugares donde te imponen reglas.
Recuerdo puntualmente un caso en el jardín de infantes donde mi profesora me castigó por no poder seguir las reglas. Yo estaba feliz rayando en una esquina con hojas y crayones. Pero para ellos, eso no era aceptable. En la escuela las cosas se complicaron aún más porque tenía problemas de ansiedad y me resultaba imposible mantenerme quieto durante seis horas seguidas.
Mi única forma de controlar esta ansiedad era dibujando, pero eso tampoco les gustaba a los profesores ni a mis compañeros. Recuerdo claramente las palabras de mi profesor de física-química: “Con estos dibujos mediocres, no llegarás a ningún lado”. Esas palabras resonaron mucho en mí y caí en un estado depresivo muy fuerte.
Afortunadamente, llegó internet a mi vida y descubrí el mundo del humor gráfico. Me encontré con los trabajos del genial Quino y del maravilloso Liniers, quienes me inspiraron enormemente. Aprendí que mediante simples dibujos se pueden transmitir grandes enseñanzas.
Decidí contar mis propias historias mediante cómics e incluso burlarme de mí mismo y de las situaciones que me habían hecho mal. Descubrí el poder del humor autorreferente, aceptar mis debilidades y reírme de ellas.
Cuando terminé el colegio, mi mamá me preguntó qué quería hacer y no tenía una respuesta clara. Recordé la novela gráfica “Maus” de Art Spiegelman, que habla sobre el Holocausto nazi utilizando ratones como personajes principales. Eso me hizo darme cuenta de que me gustaba contar historias y decidí estudiar periodismo.
Pero esta vez, decidí poner mis propias reglas para aprender y demostrarme a mí mismo que no era un mediocre o un fracasado. Convencí a mis profesores universitarios para hacer cómics en lugar de ensayos, lo cual fue una experiencia liberadora.
Un día, uno de mis profesores me sugirió abrir una página en redes sociales para compartir mi trabajo. Al principio tuve miedo, pero él me recordó que el juego es lo más serio que existe. Así que subí mi primera viñeta sin expectativas y obtuve una respuesta increíble.
Mis dibujos comenzaron a crecer exponencialmente en popularidad. Personas se identificaban con ellos y empezaron a escribirme contándome sus experiencias similares. También comencé a colaborar con otros ilustradores y músicos.
Todo esto cambió mi vida por completo. Me di cuenta del poder del arte para conectar con los demás y expresar nuestras emociones más profundas.
A través del dibujo y el humor gráfico, encontré una forma de expresar mis emociones y superar mis problemas de ansiedad. Descubrí que no debemos seguir las reglas impuestas por otros, sino seguir nuestra pasión y vivir una vida auténtica. Agradezco a todas las personas que se han sentido identificadas con mi trabajo y me han apoyado en este camino.
Así que les digo a todos ustedes: ¡no tengan miedo de ser ustedes mismos, de expresarse a través del arte y de seguir sus sueños! La vida es demasiado corta para conformarse con lo establecido. Sigamos creando, inspirando y conectando con los demás.