Mujeres en la ciencia: Rompiendo barreras y cambiando el futuro
Descubre cómo Ana Karen está revolucionando la educación STEM y cerrando la brecha de género en ciencia y tecnología. ¡No te lo pierdas!
Descubriendo el poder de la tecnología y las mujeres
Hola, ¿cómo estás? Hoy quiero compartir contigo algo que me ha dejado impactado. Recientemente vi una charla TEDx muy interesante impartida por Ana Karen Ramirez, una emprendedora apasionada por la tecnología y defensora del empoderamiento femenino. En su charla, Ana Karen nos cuenta sobre su experiencia como emprendedora y cómo la tecnología ha sido fundamental para mantener a flote su empresa en momentos difíciles.
Desarrollando tecnología a mi favor
A lo largo de siete años como emprendedora, Ana Karen ha enfrentado numerosos desafíos que han puesto en peligro su negocio. Desde conflictos con socios hasta un terremoto devastador en México en 2017 que colapsó el edificio donde se encontraba su empresa. Y como si eso no fuera suficiente, la pandemia global también afectó gravemente a los emprendimientos.
Sin embargo, Ana Karen destaca que lo que realmente salvó tanto a ella como a su empresa fue haber desarrollado tecnología a su favor. A través de su emprendimiento llamado Epic Win, trabaja con niñas y mujeres para fomentar el interés y la participación femenina en áreas STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas). Según ella, el futuro del mundo depende de las mujeres y también de la tecnología.
La brecha de género en STEM
Ana Karen señala que lamentablemente existe una brecha de género significativa en las carreras STEM. Estas profesiones, que lideran el sector tecnológico, siguen siendo dominadas por hombres. A pesar de que las mujeres representan el 51% de la población mundial, su participación en áreas STEM es aún limitada.
La aceleración de la digitalización y el crecimiento exponencial de la industria tecnológica nos lleva a un futuro donde las máquinas superarán la inteligencia humana. Se estima que esto ocurrirá para el año 2045. La pandemia nos ha mostrado lo rápido que el mundo puede volverse digital y cómo nuevas tecnologías emergen mientras otras desaparecen.
Es por eso que Ana Karen advierte sobre los posibles efectos negativos si las mujeres no participamos activamente en este futuro tecnológico. Si dejamos de lado la representación femenina y la diversidad en estos campos, podríamos enfrentarnos a problemas como discriminación algorítmica y falta de inclusión en aplicaciones y sistemas desarrollados por inteligencia artificial.
Educando a niñas para cerrar la brecha
Pero Ana Karen no solo se queda en señalar los problemas, sino que propone soluciones concretas para cerrar esta brecha de género. Su trabajo con Epic Win se enfoca en educar a niñas y mujeres, brindándoles herramientas y oportunidades para adentrarse en áreas STEM desde temprana edad.
Según su experiencia trabajando con más de 70 niñas, Ana Karen ha observado cómo las disciplinas STEM les proporcionan valores fundamentales como confianza, perseverancia e independencia. Al enfrentarse a desafíos difíciles como programación o electrónica, estas niñas aprenden a resolver problemas por sí mismas y desarrollan una mentalidad de crecimiento.
Es así como Ana Karen ve en las STEM un verdadero empoderamiento para las mujeres. Al superar obstáculos y aprender a enfrentar la dificultad, las niñas adquieren fortaleza y confianza en sí mismas. Y esto es solo el comienzo de un futuro donde las mujeres estén plenamente representadas.
Empoderando a las niñas
Pero, ¿cómo podemos empoderar a las niñas y fomentar su interés en áreas STEM? Ana Karen nos comparte cuatro acciones clave:
- Enseñarles sobre el fracaso: Aceptar los errores y aprender de ellos es fundamental para desarrollar una mentalidad de mejora continua. Debemos enseñarles que el fracaso no es algo negativo, sino una oportunidad para crecer.
- Hablarles sobre otras mujeres exitosas: Los modelos de rol son importantes para inspirarse. Mostrarles ejemplos de mujeres que están triunfando en todas las profesiones les ayudará a visualizarse en esos roles.
- Fomentar una mentalidad de crecimiento: Las niñas deben entender que su género no define sus habilidades intelectuales. No debemos sugerirles que ciertas actividades son más adecuadas para hombres o mujeres. En cambio, debemos alentarlas a explorar cualquier campo que deseen sin limitaciones.
- Alejarse del perfeccionismo: El miedo al qué dirán y la búsqueda constante de la perfección pueden limitar a las niñas en la búsqueda de sus sueños. Debemos fomentar un ambiente donde se sientan seguras para intentar cosas difíciles y aprender de los errores.
En resumen, Ana Karen nos invita a escribir el futuro que el mundo necesita. Un futuro donde las mujeres estén plenamente representadas en áreas STEM y sean protagonistas del avance tecnológico. Cerrando la brecha de género y empoderando a las niñas desde temprana edad, podemos construir una sociedad más equitativa e inclusiva.
Así que recordemos: menos perfección, más agallas; menos miedo al fracaso, más perseverancia; menos estereotipos, más confianza en nosotras mismas. ¡Es hora de dejar que las niñas hagan cosas difíciles y brillen en el campo STEM!